Muchas veces uno critica a la familia que tiene, y realmente es una soberana estupidez, porque independientemente de la familia y los problemas que cada uno posea, la familia nos hace reconocer los lazos de fidelidad que tenemos y la confianza tan necesaria y escasa de estos tiempos.
Hoy me pasó algo que probó la conexión que tengo en mi familia. Salimos juntos, mi hermana y yo, toda la tarde estuvimos recorriendo parte de Santiago, cuando ya era tarde decidimos regresar a casa y de paso comprar algo rico para la once junto a nuestra madre.
Hasta aquí todo bien.
Fuimos a esperar el microbús y la fila era enorme, después aplicamos la opción B y fuimos al metro Pedro de Valdivia –graso error- estaba repleto!, así que volvimos al plan A, esperamos pacientemente y abordamos nuestro bus del Transantiago, llenos hasta decir basta, cada uno de nosotros nos fuimos escuchando nuestra música, un señor nos separaba, de pronto a mitad de camino mi hermana se desvanece entre la multitud, ante mis ojos atónitos me doy cuenta del desmayo que sufría mi hermana cuando terminó en el suelo del microbús, apartando a la gente para socorrerla y de paso recoger sus gafas, me doy cuenta de lo mucho que me preocupa el bienestar de quienes más quiero en esta vida, mi madre y hermana sobretodo, el miedo que sentí en esos instantes fue horrible.
Luego nos bajamos del bus y ella seguía pálida, llegamos a casa y se siente mucho mejor. Espero que todo haya sido nada más que un susto, aunque le dije que fuera al médico, para salir de cualquier duda.
Hoy me pasó algo que probó la conexión que tengo en mi familia. Salimos juntos, mi hermana y yo, toda la tarde estuvimos recorriendo parte de Santiago, cuando ya era tarde decidimos regresar a casa y de paso comprar algo rico para la once junto a nuestra madre.
Hasta aquí todo bien.
Fuimos a esperar el microbús y la fila era enorme, después aplicamos la opción B y fuimos al metro Pedro de Valdivia –graso error- estaba repleto!, así que volvimos al plan A, esperamos pacientemente y abordamos nuestro bus del Transantiago, llenos hasta decir basta, cada uno de nosotros nos fuimos escuchando nuestra música, un señor nos separaba, de pronto a mitad de camino mi hermana se desvanece entre la multitud, ante mis ojos atónitos me doy cuenta del desmayo que sufría mi hermana cuando terminó en el suelo del microbús, apartando a la gente para socorrerla y de paso recoger sus gafas, me doy cuenta de lo mucho que me preocupa el bienestar de quienes más quiero en esta vida, mi madre y hermana sobretodo, el miedo que sentí en esos instantes fue horrible.
Luego nos bajamos del bus y ella seguía pálida, llegamos a casa y se siente mucho mejor. Espero que todo haya sido nada más que un susto, aunque le dije que fuera al médico, para salir de cualquier duda.
5 valientes:
Hola a todos!!!
Espero que os guste el nuevo diseño en el encabezado, hace tiempo estaba listo, pero ahora ya está completo este blog.
Señor Perez-Hedero! espero que también le agrade, ya que es uno de los relatores primordiales de este blog!
Saludos a Tod@s!!
*SPICA
Perecedero a las letras.
La verdad nunca he perdido a un ser querido de esos con los cuales uno viene de fábrica, quizas a una abuela, pero estaba muy niño y no recuerdo que se siente, pero me pasa algo extraño, con mi familia siento que estoy mas preparado para eso, pues he compartido tanto, enojos y alegrías, que quizás me parece mas lógico que en algún minuto ya no estén a mi lado. No quiero parecer frío o insensible, para nada, de seguro morirá una parte de mi junto con ellos, pero siento que la situación podría ser mas llevadera. Me descoloca mas el hecho de que la gente que llega mi vida, la gente elegida, desaparesca de ella, quizás es por el hecho de que con esa gente muchos factores pueden intervnir en esa desaparición, en cambio mi familia no, ella es segura, ella estará conmigo hasta el último, por que fuimos manufacturados de esa forma, ellos son mis accesorios y yo el de ellos, pero con el resto del mundo no, son simples adornitos que quizás de gastados se caen, o por que ya uno deja de llamar la atención es desechado., eso me asusta mas, pues no hay seguridad y eso es algo que me gusta tanto tener pues yo la doy.
Es un cliché horrible, pero creo que la familia buena o mala, es un nexo increíble con nuestra escencia, que ahí de algún modo encontramos ese abrigo que a veces tanto nos hace falta.
Don Spica, la verdad me gustó mucho el nuevo diseño de su-nuestra página, me llevé una grata sorpresa al verla el día de hoy,y bueno de paso de recibir post suyo, que como dueño de casa que es usted, me interesa mucho.
Me dió un poco de risa-lata lo que me dices en este post, con lo que soy uno de los principales relatores, no sé, no quiero quedar como el tipo mas miedoso de todos jeje, es solo que me ocurren cosas y con lo sensible que soy me gusta expresarlas, a veces son simples y vanales dudas, pero que a veces necesitan ser sacadas para una tranquilidad mayor.
¿Sabes? en un minuto pensé en dejar de escribir, pensé que quizás no es tan bueno estar exponiendose tan abiertamente, a pesar de que nadie sabe quien es realmente Perecedero, pero finalmente decidí que no, que quizás algo positivo puedo sacar al escribir y escribir, ¿quién sabe no?.
Gracias por su post en mi texto "Perecedero", creo que lo que dices es cierto, ambos pierden, la mala suerte en algún minuto acabará o al menos eso prefiero pensar, me gusta mirar el lado bueno de las cosas, si no ya me hubiese ahorcado jejeje.
Un abrazo enorme para usted señor y espero que no pase tanto tiempo antes de tener noticias suyas.
espero que la hermana esté mejor julius...
agregué los links de nuestros blogs.
Si alguien más desea hacerlo no espere más¡¡altiro altiro¡
saludos
claudia, de la madriguera colora
Mister Perez-Hedero! lo siento ya fuiste rebautizado por mí...
La resilencia en su momento también fue una palabra dicha por alguna persona en mi vida, pero ya la había olvidado en el léxico que comunmente utilizo, aunque me hizo recordar otra "Altruismo".
Y ambas tienen una relación demasiado estrecha en su significación.
Me quedo con esto que encontré en una página de internet:
"Los seres humanos en circunstancias especialmente difíciles requieren una mano amiga, un acompañante, un "cómplice significativo" que les permita crear lazos y vínculos consigo mismos, con los otros y con su entorno. Todos estos enunciados son caminos de vincularidad que suscitan el potencial humano de la resilencia".
Creo conocerte un poco más cada día, cosas de la virtualidad, de la extraña "realidad" que nos inventamos en lo cotidiano.
Saludos desde un lugar apartado *SPICA
La verdad es que el miedo que uno siente, cuando un ser querido se enferma es realmente atroz.
Lo bueno de todo, es que la Carito fue el florerito del bus hasta que llegaron a la casa, jeje.
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