jueves, 14 de junio de 2007

Licencia.por Perecedero

No había tenido el tiempo de escribir en este blog, el motivo: Mi jefe debe ser operado de la próstata, por lo cual he debido asumir todo el trabajo del área y eso ha sido fatal. Fue horrible el verme frente a un montón de procesos a los cuales con suerte si había visto muy levemente, eso me hizo sentir pésimo, me sentía inútil, el no tener las herramientas necesarias para poder sacar a flote esto yo solo me hizo sentir un tanto perdido; mas aún cuando traté de buscar ayuda en mis jefes superiores los cuales se lavaron las manos y simplemente dejaron todo el peso en mis hombros. ¿Qué hacer? ¿Dejar todo botado?, arriesgando no solo mi puesto de trabajo si no que también el de mi jefe por no haberme enseñado lo suficiente durante este año que llevo acá, no, no veía que esa fuese una buena opción, así que me dije :”Perecedero, da lo mejor” y así fue, me reventé estas últimas tres semanas, no tenía un segundo para nada, entre llamados de teléfonos, mails, consultas de personas en la oficina, que alegatos por que se les debían horas, días sueldos anteriores, finiquitos, cheques extraviados, licencias médicas y una infinidad de otros papeleos que son habituales de mi trabajo pero sumado a todo el proceso de calcular los sueldos, hicieron que mi cabecita colapsara. Aún así logré sacar adelante todo el proceso, logré pagar los sueldos y además las cotizaciones sin mayor problema. Pero como todo siempre es gris cuando ya daba por finalizada mi tarea mi jefe mala onda me pide un calculo de finiquito, el cual no sabía hacer, le digo esto a él y como premio a todo mi esfuerzo me responde: “eres mas flojo tu, no sabes hacer nada”….
Ok, me maté trabajando y finalmente me gano un “no sabes hacer nada” ¿lindo no?.

2 valientes:

Nico dijo...

Me suena tan familiar.
Donde yo trabajaba, siempre me decían: Porqué se demora tanto en hacer ese escrrito, si no tiene ninguna ciencia!. A lo que yo respondía: El escrito lo terminé hace dos horas, pero como ud. está encerrado en su oficina no se lo he podido mostrar.
Le tengo listo, el escrito, la demanda, y el informe que me pidió.
Ahh ok, me decía.
Pero como con la "jefa superiora", teníamos roces, como el de prohibición de almorzar, así que le dije: Sra. RE-NUN-CIO. La vieja se puso blanca y mi jefe: Porfa no se vaya.
Pero era mucho el abuso...
No estoy pa´q me pongan la pata encima.

Espíritu Intermedio dijo...

Don Perez...

Cuando nos suceden cosas como las que tú describes en el texto, me pregunto:

¿Cuánto esperamos para aprender?

Está bien, uno aprende cosas todos los días, aunque sean nimiedades, pero lo importante es ir aprendiendo y aclarar todas las dudas.

No es mi idea agobiarte con esta postura, pero a mi también me ha sucedido, que cada vez que a uno le piden algo que no sabemos, nos escudamos en que otro no nos enseñó, pues bien creo que el mérito de uno es aprender solito lo que no se nos enseña, y en caso de no ser autodidácta, hay que pedir auxilio; lamentablemente en tu caso no pudiste -al estar tu jefe ausente- eso sí me parece que lo mínimo que puede hacer él (aunque esté enfermo) es ayudarte con algún llamadito telefónico más que sea ¿no?

A fin de cuentas, sus dos cabezas son las que tienen precio por ahora ...

Saludos desde las estrellas, señor de los papeleos varios *SPICA